De la máquina de escribir a las memorias de traducción
Andoni Sarriegi Eskisabel

Andoni Sarriegi

Introducción

El compañero de profesión y miembro de EIZIE Karlos Del Olmo me ha invitado a escribir para la revista Senez las vivencias de mi vida de traductor, los resultados de mi experiencia, las cuestiones del inicio y de hoy día, mis reflexiones, etc. En dos palabras, mis vivencias en el mundo de la traducción y del euskara. Eso me da mala espina pues quiere decir que he envejecido y que se me pide que escriba memorias para personas más jóvenes..., pero sin negar esa verdad, tiene también su parte agradable, ofrecer a los que continúan en la profesión y a los que trabajan en torno al euskara o a los que se incorporen a esas tareas en los próximos años, mi experiencia y la de mi generación tal como la he vivido, con los recuerdos agradables y no tan agradables, pues ha habido de todo en nuestro caminar. No se si cumpliré bien el mandato, pero le di mi palabra a Karlos y trataré de exponer adecuadamente mi punto de vista. Por otra parte, hay por ahí otros como yo, jubilados ya del quehacer oficial que tienen también sus experiencias y vivencias y no estaría mal que ellos también publicaran sus cosas. Desde aquí mi saludo y mi invitación a ellos.

La década de 1950

Estudié siete años y medio en el colegio de San Martin de Loinatz - La Salle de Beasain (enero de 1953 a junio de 1960) y al menos en los últimos cuatro años estuve aprendiendo a escribir a máquina (con todos los dedos en modelos de máquinas de aquella época —Remington, Hispano Olivetti, etc.— unos 10 minutos al días con mucha prisa, copiando una frase dada por el fraile (al final escribiendo asimismo series de palabras y columnas). Nada extraordinario, pero aprendimos más que algunos escribientes de aquella época que escribían solamente con dos dedos. La máquina de escribir fue durante nuestra niñez y nuestra juventud el instrumento de tecnología más avanzado para la escritura.

La necesidad de cierta traducción me vino al empezar en la escuela con cinco años. Yo hablaba en euskara en casa, en la familia y en mi entorno. También escuchaba algo de español entre vecinos, en las calles de pueblo y entre algunos familiares y comprendía algunas palabras al comenzar en la escuela, pero hablar, no hablaba nada. En 1951, al ingresar en el colegio de las monjas, tuve que abrir bien los oídos aun cuando la lengua no se me aligeró demasiado en español. Los difuntos padres, en casa, con su habla habitual (léxico escolar español con fraseología dialectal euskaldun) me ayudaron en el cálculo y la geometría (libros de texto en español); la doctrina cristiana pude estudiarla en euskara en los primeros niveles y todos los demás temas tuve que estudiarlos en español, de memoria al uso de la época. Todo ello, me llevó a elaborar una especie de traducción automática diglósica y obligada. Y digo lo de diglósico porque los medios que pude utilizar en euskara (el uso del euskara dialectal hablado en casa y en el barrio, la doctrina y algunos cantos utilizados como cosa muy marginal en casa, en la escuela y en la iglesia) eran mucho más escasos que los de español, no estaban normalizados y su uso era muy restringido en aquella sociedad. No tuve libros con normas del euskara (gramática) o similares, solamente dispuse de unas pocas reglas ortográficas de euskara asimiladas por mi difunto padre antes de la guerra: que en euskara se debía escribir con k en sonidos fuertes y con z en débiles, que siempre había que escribir con b, que ga, ge, gi, go, gu eran débiles y ja, je, ji, jo, ju sonoras, que rr y ll, se escribían r y l con acento o sombrero, etc., que no era sekau sino leortu en euskara etc. Esas normas, salvo la de r eta l, pude verlos en la practica en el texto de la doctrina.

Década de 1960: Euskaldunización alfabetización y al final Euskara Batua.

Al realizar los estudios profesionales en la Escuela Profesional de CAF (1960-1963), entre otras cosas, muchas asignaturas las daban empleados que eran técnicos en la empresa y admiraban los avances tecnológicos, aun cuando la mayoría de la tecnología aquí por aquel entonces, fuera similar al de la preguerra en general. Algo parecido se puede decir de las ideas que tenían muchos de los oficinistas, mandos y cargos que conocimos en las prácticas de media jornada que realizábamos dentro de la empresa, pero la mayoría de ellos (muchos monolingues españoles y algunos franquistas empedernidos, entre los que algunos eran además concejales en algunos ayuntamientos), salvo unos pocos nacionalistas-vasquistas, más de una vez nos echaron en cara a los euskaldunes que hablábamos en euskara entre nosotros cuando podíamos, que el euskara no valía para nada, que no disponíamos de léxico para expresar cualquier cosa que decíamos o escribíamos allí en español, etc. A decir verdad, sentía un dolor profundo al escuchar aquella injuria, que además el futuro nos ha enseñado que era mentira. Desgraciadamente, yo no sabía en aquel entonces lo suficiente para desmentir aquella infamia y el euskara asimismo, en general, no estaba preparado para desmentir instantáneamente aquella estupidez intencionada. Yo y mis compañeros euskaldunes ya hubiésemos agradecido en aquella época el poder realizar traducciones paralelas sobre cualquier texto que circulaba en la Oficina Técnica de CAF. No sabíamos como sabemos hoy, que en CAF, antes de la guerra, hubo una aviso públicamente expuesto en la central eléctrica de Zaldibia exclusivamente en euskara y que en aquel texto estaban expresadas muy dignamente en euskara las reglas y observaciones para el uso de la electricidad y las máquinas eléctricas. Aquellos fascistas españolistas monolingües, presentaban la arrogancia y la incultura de los militares vencedores por aquellos años y, tal como hoy todavía algunos lo siguen haciendo, eran los que hacían ocultar y anular la memoria histórica real.

En el período que hice los estudios de Ingeniería Técnica en Donostia (1963 1967) surgieron los movimientos de euskaldunización y alfabetización, concretamente el curso 1966 67. Al realizar aquellos estudios técnicos que los tuve que hacer en español, tuve también compañeros euskaldunes y entre nosotros nos expresábamos en euskara sobre los temas de estudio, aun cuando la mayoría del léxico, forzosamente, usábamos el del español porque todos nuestros estudios básicos escolares los habíamos realizado así y en euskara no sabíamos ni como decir ni como escribir. Eso nos dolía mucho a algunos y sentíamos una gran impotencia interior. Ya con anterioridad se habían realizado algunos cursos de alfabetización en algunos lugares[1]. Pero en aquel curso 1966-67[2], Jon Oñatibia por una parte publicó el Método de Euskera Radiofónico (primer método publicado para que los no vasco paralantes aprendieran euskara) en 1966 y comenzó a dar cursillos de preparación para el uso del método en grupos de euskaldunes de pueblo en pueblo y de grupo en grupo. Por otra parte, el mismo curso, Rikardo Arregi anduvo también de pueblo en pueblo dando charlas sobre la necesidad de la alfabetización en euskara y el verano de 1967 se logró dar el primer curso de alfabetización "oficial" organizado por Euskaltzaindia (Academia de la Lengua Vasca)[3] . A mi me alcanzaron los dos. Oñatibia en Donostia y el último curso de estudios comencé a dar clases a algunos compañeros de estudio no vascoparlantes con ese método con una base muy escasa. Mis amigos del OARGUI[4] de Beasain, comenzaron en Beasain con la misma tarea[5]. El movimiento de alfabetización de Arregi me pilló en Beasain el próximo año, 1968, cuando se dio allí el primer curso de alfabetización[6]. El ejercicio realizado durante aquellos años, fuera de las horas de trabajo profesionales, en el campo de la enseñanza del euskara, así como en la década siguiente hasta 1980, dando innumerables clases de alfabetización y euskaldunización, tuvieron mucho que ver en mi preparación lingüística y en la traductología para tareas de mayor calado. Además de adiestrarme forzosamente en euskara, la relación mantenida con los no vascoparlantes y el ver que el euskara como idioma no estaba a la par con el español y el tener que soportar eso en mis propias carnes, me pusieron en todo momento con miras hacia usos de mayor nivel en euskara junto con otras personas de mi alrededor.

Ya teníamos grandes traductores euskaldunes. Ahí estaban en alguna parte todos nuestros clásicos que habían realizado grandes traducciones. Solamente por citar algunos de la última generación, Orixe, Jokin Zaitegi, Nemesio Etxaniz, etc., además de sus obras de creación, habían realizado trabajos de traducción de literatura y otros temas, algunos además obras muy grandes y excelentes. En Ciencias, asmismo, había obras escritas antes de la guerra, algunas creadas o modeladas y otras traducidas: Zenbakizti lengaien ikastia (Aritmética), Neurriztia (Geometría), Pisia (Física), Kimia (Química), etc., pero nosotros no sabíamos nada de su existencia. El único trabajo ímprobo que yo tuve entre mis manos por aquellas fechas fue el misal Urte guziko meza bezperak[7] (en euskara y latín) de Orixe (Nikolas Ormaetxea) que mi difunta madre me regaló por la década de 1960 y que para ser traducido directamente del latín en aquella época y en solitario, lo considero una gran obra, tanto entonces como ahora. Nosotros, los que no estudiamos en los seminarios, no tuvimos ninguna transmisión de la lengua escrita, nadie nos dio a conocer la existencia de nuestras grandes obras, en el mercado no estaban en venta, en las bibliotecas de nuestros pueblos no había libros escritos en euskara (excepto en algunos seminarios y conventos, y los que no fuimos a realizar estudios religiosos no tuvimos acceso a ellos) y de haberlos, los mantenían tan escondidos que nosotros nunca tuvimos noticia de su existencia, ni tampòco nadie que nos informara sobre ellos y después de esa gran interrupción cultural y lingüística, sentíamos la necesidad de poner al día nuestro euskara dialectal empobrecido por las circunstancias mencionadas[8].

De todos modos, para ir afincando las líneas maestras para normalizar el idioma fue fundamental el que Euskaltzaindia diera en 1968 las normas ortográficas del Euskara Batua (nada más todavía) y el que en los años próximos siguiera normalizando los verbos, la declinación y demás elementos gramaticales. Desgraciadamente han transcurrido demasiados años hasta normalizar y aprobar el léxico básico (en la década de 1980 comenzó a acelerarse el desarrollo de ese trabajo que ya venía haciéndose anteriormente a ritmo muy lento y aun cuando ese tipo de trabajos no terminan nunca, el desarrollo de los más básicos aun no ha concluído).

La década de 1970: Creación de nuevos organismos para elaborar el Euskara y desarrollo del Euskara Batua.

Entre 1968 y 1972, con la intención de completar un poco aquellos textos de literatura clásica algo pasados que aparecían en los apuntes de Euskaltzaindia en las clases que se dieron en Beasain y queriendo ofrecer a nuestros alumnos cuestines más modernas y técnicas (ente ellos había algunos que trabajaban en talleres y oficinas), en las mañanas de muchos domingos Jon Gurutz Tolosa y yo estuvimos entresacando del Diccionario Castellano-Vasco de Plazido Muxika (el único que disponíamos por aquel entonces) léxico en euskara de palabras como tornillo, tuerca, eje, rueda, casquillo, cojinete, figura, dibujo, vista, alzado, perfil, planta. Algunos los conocíamos del habla (ardatz, gurpil, etc.), pero otros no y aquel diccionario daba lo que daba, a veces una sinonimia impresionnte de todos lo rincones y en otros casos ni rastro. No conocíamos las traducciones que para aquel entonces estaban hechas (las ancestrales, las de la preguerra y las de la postguerra, etc.), ni tampoco el léxico práctico de los talleres de Eibar y alrededores, ni tampoco lo que viene en Peru Abarka de J. A. Mogel, ni nada. No teníamos noticia del diccionario de Azkue (no se vendía en las librerías), mucho menos de los diccionarios de Larramendi, Lhande o Duvoisin. Pero nosotros, para nosotros y para los mecánicos de nuestro entorno queríamos algo de nivel más elevado y así anduvimos buscando sin mucho éxito. Además, como he dicho antes, nos faltaban las referencias de gente más veterana y de las generaciones anteriores, dado que no habíamos recibido la transmisión de la lengua a niveles superiores al habla. Nos sucedía lo mismo cuando queríamos escribir sobre economía o temas sociales.

Parejos con aquellas sesiones de alfabetización, me sucedieron dos cosas. Por una parte, la asociación Jakintza de Ordizia (que gestionaba la Ikastola) organizó un concurso de ensayo sobre Euskal Kultura (Cultura Vasca) como tema y por otra parte hacia 1971 la EKT (Euskal Kultura Taldea) de la Escuela de Ingenieros de Donostia organizó asimismo un concurso en euskara para trabajos escritos sobre temas técnicos. Envie mis trabajos a los dos concursos y en ambos obtuve una fracción del premio único que se repartió entre varios autores. Ambos concursos me exigieron un esfuerzo ímprobo para presentar los trabajos que presenté, desgraciadamente tanto o más en el aspecto lingüístico que en el aspecto temario. Hice un gran esfuerzo para buscar, traducir, etc., y escribir en euskara muchos términos que se usaban en los libros en español y además he de decir que en muchos casos no acerté de lleno en lograrlos. En aquella época, una de las pocas publicaciones sobre temas culturales generales que se publicada en euskara era la revista Jakin y por otra parte estaban el semanario Zeruko Argia y la publicación quincenal Anaitasuna de información general y a mi en concreto me ayudaron mucho esas publicaciones, Jakin sobre todo para hacerme con una terminología y estilo de redacción algo más elevados que el habla normal.

ELHUYAR, UEU, Formación Profesional, UZEI

Al poco tiempo, aquel grupo de estudiantes de Ingeniería que formaron el EKT creo la asociación Elhuyar en 1972. No estuve entre los fundadores, pero tan pronto como me llegó la invitación de ser socio me hice socio enseguida por la necesidad que veía de tratar los temas técnicos en euskara y por la necesidad de buscar ayuda para ello. Junto con otras fundaciones que mencionaré a continuación, aquella fundación resultó ser fundamental y decisoria para extender el uso del euskara a las ciencias, a la enseñanza y a los temas universitarios. En 1974 comenzó a publicarse la revista Elhuyar para normalizar la divulgación de la ciencia en euskara y he aquí lo que publicó en el primer número: "Euskal kulturagintzan ia dena egiteko dadukagula gauza jakina eta tamalgarria da. Sukaldeko girotik eta lagunartetik irtetzen garen bezain laster bide ilunetatik abiatzen gara, euskara lotsagarri geratzen zaigu batzutan. Are gehiago hizkera zehatz, garden, zorrotz bat behar den gaietan. Gauza berari bizpahiru izen ezartzen badiogu eta izen batek, antzinako botikek bezala, denetarako balio badu, azkenean ez dakigu zer esaten ari garen ere. Zientzia gaietan konkretuki ez daiteke inolaz ere Babel-go Dorreak handituz joan daitezen utz, hiztegi aberatsak, konzeptuen arlo osoa beregan dutenak behar ditugu, baina hori ez da aski. Zientzi-euskara bat eraikiko badugu, piskana denok ados egon behar dugu, gaiak erabiltzeko ohitura bat hartuz, ohitura hori duen jende multzo ugari bat sortuz, edozein lekutako zientzilarik erabiltzen duen formulazioa eta euskara, batek bestea bortxatu gabe, uztartuz, e.a. Hori dena nekez lortuko genuke hitz zerrenda luzeak asmatuz bakarrik; gehiago behar dugu. Euskarari, zientzien plazara jalgi dadin, agerlekuak prestatu behar dizkiogu bere sortzaileek nolakoa den erakus diezaguten eta denon artean haiei lagun diezaiegun gero eta helduagoa, egokiagoa, apainagoa sortzen." (...)

Por lo tanto, las preocupaciones, las necesidades y las carencias no eran solo mías por desgracia y gracias a habernos reunido tomamos las fuerzas suficientes para ir respondiendo a aquellas impotencias. Yo también publiqué algunos trabajillos en aquella revista, algunos escritos en euskara tras disponer de información, otros traducidos o elaborados a partir de textos de otros idiomas, de todo un poco. El primero se publicó en junio de 1977 en el nº 11 de la revista y durante los años siguientes publiqué otros según los temas que tuve a mano.

El verano de 1974 se creó UEU (Udako Euskal Unibertsitatea) en Donibane Lohizun (Saint Jean de Luz). Tanto a plazo corto y no digamos nada a largo plazo, aquella fundación fue, ha sido y sigue siendo muy importante. Hay que tener en cuenta que además de todo lo que ha realizado hasta el presente, entre otras cuestiones y gracias a esa entidad hoy día está a punto de constituirse Euskal Unibertsitatea (La Universidad en euskara). A ver si en breve se convierte en realidad. Hay que mencionar asimismo que UEU en estos 35 años ha realizado un trabajo gigantesco elaborando temas universitarios en euskara (cursos, publicación de textos, creación de materiales de formato digital, formación de profesorado y alumnado, etc.). En todo ello han tenido una importancia capital tanto las traducciones como las redacciones.

A la par de aquellos cursos de Alfabetización iniciales, comencé a dar clases en la Escuela Profesional del Goierri. El curso 1969 70 comenzaron las clases de Ingeniería Técnica vespertinas[9], en español claro y tuve la oportunidad de dar una clase de Mecánica. A partir del curso siguiente, pasé a trabajar en aquella escuela a jornada completa y de 1970 a 1977 trabajé allí durante siete años como profesor impartiendo clases de temas técnicos en español. Por aquellos años, Jon Gurutz Tolosa y Ramon Balentziaga al menos (más tarde también Jexux Aizpurua y otros) estuvieron dando clases de euskara profesionalmente en aquel centro[10]. A mí me ilusionaba mucho el pensar que algún día podría llegar a dar aquellas clases en euskara, pero en aquel momento ni yo estaba preparado para ello, ni había textos preparados, ni la organización de la Escuela estaba dispuesta, por una parte porque todavía no había alumnado con estudios básicos realizados en euskara (las primeras promociones de la ikastolas del Goierri cumplieron 14 años a partir de 1977 y además de ser pocos en su inicio, la mayoría de ellos optaron por el bachillerato), y por otra parte porque no había profesorado euskaldún preparado; además, había muchos profesores monolingües españoles. A decir verdad, en la década de 1980 muchos de ellos aprendieron euskara y llegaron a dar clases en euskara.

En 1975 me llegó la hora de empezar a cumplir mis sueños a medias. La Escuela Profesional y de Ingeniería Técnica de Arrasate (Mondragón) convocó a una reunión a las Escuelas Profesionales de Gipuzkoa. Asunto: preparación de materiales de Tecnología, Física, Matemáticas, y demás temas principales para poder empezar a dar las clases en euskara. Yo acudí como representante de la Escuela Profesional del Goierri a aquellas reuniones. La Escuela de Arrasate tenía el tema muy claro. Se debía comenzar con la Tecnología Mecánica porque era la más numerosa, básica y extensa. Se eligió el texto español de la editorial Everest para traducirlo y ya que las demás Escuelas como Escuelas no estaban dispuestas para ello, la de Arrasate tomó la responsabilidad de financiar la edición de la Tecnología de FP1-1. Compró la mitad (2.500 ejemplares) de la edición (5.000 ejemplares) para su Escuela y la responsabilidad de la traducción la tomó la Ascociación Elhuyar con un equipo formado por cinco personas. Como era profesor de Enseñanza Profesional, fui uno de los que compusieron aquel equipo. Trabajé bien y a gusto. Fue muy agradable trabajar al lado de personas que tenían más experiencia que yo. El libro de Tecnología de FP1-1 se publicó en 1977 y aunque leído hoy día resulta algo duro, se utilizaron los materiales existentes en el ramo hasta entonces (diccionarios, léxico de Eibar, etc.) para realizar aquella edición. El mismo grupo tradujo a continuación la de FP1-2. Luego, por razones de rendimiento, financiación, nº de alumnos y cuestiones similares, traduje en solitario para Arrasate la Tecnología de FP2-1 en sus dos especialidades mecánicas, pero no se publicaron como libros, sino como cuadernos de trabajo en la propia Escuela. Seguidamente se hicieron las traducciones de los libros de Dibujo. Los textos de Física no se tradujeron y se redactaron entre un equipo, en el que me incluí. Los libros de Matemáticas se redactaron a la vez en un grupo que formó Elhuyar con ese menester; yo no tomé parte. En todas esas actividades de euskaldunización de la Escuela de Arrasate, el profesor y amigo Joseba Etxebarria hizo un trabajo y un esfuerzo ímprobo. Por aquellas fechas asimismo se prepararon textos de Bachillerato en euskara para las Ikastolas y nos reunimos muchos profesores de Ikastolas y otros ayudantes para preparar tema por tema los materiales correspondientes tanto traducidos como redactados. Posteriormente, en unos quince años, se publicaron muchísimos textos de Formación Profesional y de Bachillerato y me tocó participar en algunos de ellos. No obstante, en el transcurso del tiempo y dada la política de subvenciones del Departamento de Educación ha ido in crescendo la tendencia de traducir de otros idiomas, principalmente del español, en detrimento de aquellos grupos de redacción y al comenzar a publicar traducciones las editoriales externas a Euskal Herria se ha incrementado esa tendencia, por lo que la traducción se ha tragado a la redacción. Ahora el euskara está mucho más normalizado y se realizan traducciones mucho mejores que antes, pero a mi entender, se ha arrinconado mucho el camino de la creación, del amoldamiento y de la redacción y eso no es bueno.

En 1976, la editorial Jakin publicó un trabajo que se puede tomar como símbolo para la redacción y la traducción: Natur Zientziak Hiztegia (Diccionario de Ciencias Naturales) que fue para todos nosotros aquello de EL IMPOSIBLE VENCIDO A BASE DE TRABAJO en el campo del léxico del Euskara Batua en cuanto a su precisión y uso en temas universales. Fue como el pistoletazo de salida para muchos de nosotros. El camino emprendido por todas aquellas publicaciones, me llenaron el corazón en aquella época y como a mí diría que a muchos como yo. Aun no siendo los mejores del mundo, fueron trabajos de arrancada en la normalización, se reencontró el camino iniciado antes de la guerra, cercenado y prohibido con la guerra y la postguerra y además se hizo ese camino con el Euskara Batua. Sin ese arranque hubiese sido imposible realizar cualquier otra cosa que diera continuidad.

Enseguida, miembros del grupo Jakin crearon UZEI (Unibertsitate Zerbitzuetarako Euskal Ikastetxea) en Donostia en 1977. UZEI empezó a realizar trabajos de Lexicología y Terminología principalmente dado que se veían en esos campos las necesidades más acuciantes y así, en 1979 comenzando con la edición de Fisika Hiztegia inició una vía que hoy todavía continúa y ha realizado un trabajo terminológico que en Euskal Herria estaba por realizar. Además de publicar innumerables diccionarios terminológicos especializados, en 1986 creó la base de datos o banco terminológico llamado EUSKALTERM y aunque posteriormente no ha sido el único que ha trabajado en ello, al menos ha sido el que inició el tema y el eje principal. Entre los trabajos los de algunas especialidades son mejores que los de otras; los hay muy buenos, peores y mejores en esa pila de diccionarios; a posteriori los términos de muchos de esos diccionarios han sido revisados con mucha precisión, pero si UZEI no hubiese realizado ese trabajo de base entonces, hoy día no hubiésemos estado donde estamos o alguien hubiera tenido que crear algo similar para realizar un trabajo semejante. UZEI fue quien elaboró a petición de Euskaltzaindia el Corpus del Euskara existente hasta el siglo XX, trabajo de investigación lexicográfica para el Diccionario de Euskara Batua de Euskaltzaindia.

En 1972 Euskaltzaindia, creó el título básico de nivel D para acreditar la aptitud de enseñanza para la Alfabetización, que con el tiempo se ha convalidado con el título EGA del Gobierno Vasco y Gobierno de Navarra. Más tarde, hacia 1975, incluyendo los estudios dialectales del euskara en el programa, creó el título de nivel B, aun cuando en el devenir del tiempo no ha sido muy valorado en la práctica.

A su vez fue muy importante la asamblea que Euskaltzaindia realizó en 1978 en Bergara. En ella, fue rotundamente reafirmado el camino trazado en 1968 con unas pequeñas correcciones, se dio aprobación a la línea del Euskara Batua comenzada a diseñar diez años antes y se fijó el compromiso de seguir en la misma línea. Todo ello fue decisivo para el uso del modelo del Euskara Batua como lengua oficial que iba a tener el idioma con motivo de los cambios políticos acaecidos, aun cuando en un inicio se vislumbraron algunos modelos raros en la CAV[11]; no obstante esos modelos raros fueron superados y se puede decir que el modelo de idioma se ha ido fijando de manera adecuada.

La década de 1980: Traductor profesional.

En diciembre de 1979 comencé en CAF como Responsable de Euskara a media jornada por las tardes. Tenía que dirigir la escuela vespertina de euskara de la empresa y realizar las traducciones de la empresa relacionadas con el euskara, casi siempre del español al euskara. Un poco más tarde, en febrero de 1980, comencé a realizar trabajos de traducción asimismo en el Ayuntamiento de Beasain durante la otra media jornada y así trabajé en los dos lugares hasta 1987. A partir de 1987 he trabajado en el Ayuntamiento a jornada completa. No fui el primero en realizar traducciones en la administración, pero si de la primera hornada[12]. Los políticos de la época, todos querían darle al «euskara su espacio», pero la inmensa mayoría no tenían ni idea de sociolingüística y leyes de supervivencia de los idiomas y en contra de todos los principios fundamentales de la sociolingüística, le pusieron al euskara un camino no apto para poder circular solo en niguna parte, tanto en aquel momento y lo que es peor para el futuro. En aquel instante, los trabajadores de la administración, salvo excepciones, no estaban nada preparados para la labor y ello acarreó que se propusieran como tareas a realizar la euskaldunización de los mismos y la alfabetización de los que conocían el euskara y, los traductores, casi como máquinas, tuvieron que realizar lo imposible para poner en euskara los textos escritos en español por la mayoría de los funcionarios (no por todos). La Administración de la Autonomía no planteó para ningún lugar ni espacio el principio de "en la Administrazioan en Euskara"[13], ni siquiera como objetivo teórico[14]. Al euskara lo situaron siempre en ese segundo nivel y la elección que realizaron los políticos y gentes de cargos de aquella época, fue fundamentalmente el de traducir las actas oficiales. Eso es lo que definieron como fundamental. Sin quitar el valor simbólico que eso pueda tener, dieron más importancia al cubrir las apariencias que a diseñar usos fundamentales del idioma. El tiempo ha demostrado que en gran medida se ha invertido muchísimo tiempo en ello durante muchos años, pero que había otras tareas de mayor prioridad lingüística en las administraciones. Eso sí, para los traductores aquello fue una escuela de preparación impresionante y muchos términos tuvimos que sacarlos de donde no había, para explicar esos conceptos —muchas veces muy abruptos y trasnochados— que el español utilizaba y utiliza en la administración.

Las instituciones en aquella época no tenían ninguna obligación para con el euskara como lengua cooficial y cada cual hacía lo que le venía en gana. Entre los ayuntamientos, el de Tolosa fue el primero que hizo un diseño bastante decente y creó el Servicio de Euskara al comienzo de la década: incluyó dentro del Servicio al Jefe del Servicio de Euskara, al Traductor y al Dinamizador. Unos pocos ayuntamientos secundaron esa vía pero la inmensa mayoría no. Yo y otros como yo, aun cuando teníamos la asignación de traductores, además de cumplimentar las traducciones, y con recursos de personal insuficiente, tratamos en lo posible de hacer lo posible asimismo en otros campos —dinamización en el municipio, organización del aprendizaje de los trabajadores, etc.—.

Además, en esa década, junto con otros traductores de otras instituciones, tomé parte en la preparación de tres diccionarios en UZEI[15]. Fueron muchos cientos de personas de muchos campos diferentes los que participaron en aquellos años en la elaboración de esos diccionarios. En una docena de años, UZEI publicó diccionarios sobre muchos temas diferentes. En la década de 1980, algunos traductores de algunas instituciones, los sábados por la mañana, sin ninguna remuneración, por nuestra cuenta y riesgo, porque veíamos la necesidad de hacerlo, invertimos muchísimas horas en preparar material para diccionarios y modelos de impresos en las reuniones celebradas en UZEI y otros asimismo, también los sábados por la tarde, acuciados por la necesidad y ayudados por la militancia, en las reuniones del mismo estilo celebradas en Elhuyar.

Entre las actividades de Elhuyar en aquel tiempo, una fue la de las Alfabetizaciones Técnicas. Se impartieron muchas clases a profesores de la Enseñanza, de Bachilerato y Formación Profesional sobre todo, para familiarizarse con el léxico publicado en los textos y explicar los recursos del sintagma nominal. Esos cursos eran organizados por la Consejería de Educación. Tomé parte en algunos de ellos. Asimismo, impartieron clases sobre el Euskara para el Trabajo a empleados de las Cajas de Ahorro y otras instituciones privadas.

UZEI, UEU y ELHUYAR, fue un terceto fundamental en la década de los ochenta para fijar en gran medida la terminología y el léxico de euskara usado hoy día. Después, otras instituciones también han desarrollado asimismo trabajos de esa índole (las instituciones públicas EHU-UPV[16] y HAEE-IVAP[17] entre otras así como otras instituciones privadas como Ikastolen Elkartea, algunas editoriales, etc.) y entre todos han puesto unos cimientos muy robustos para el uso del euskara en disciplinas de niveles superiores. Finalmente, Euskaltzaindia, optó por acelerar el proceso de aprobación, corrección y decisión durante esa década de los ochenta y aun cuando hoy día todavía continúa con esa tarea, ha reglamentado temas como Hiztegi Batua, Aditz alokutiboa y otras cuestiones. Esas decisiones finales han llegado muchas veces demasiado tarde para los traductores y escritores vascos y a muchos euskaldunes bastante bien alfabetizados o a los que realizaron sus estudios en euskara en su momento, les han hecho modificar cosas aprendidas con mucho esfuerzo con esa normativización lenta y permanente. Muchos euskaldunes alfabetizados o gente que realizó sus estudios en euskara, de no reciclarse (y todos no disponen de tiempo y posibilidad para reciclarse contínuamente) han quedado fuera de juego para escribir con corrección según normas actuales; más de una generación sin ninguna duda. Muchos necesitan correctores a su lado constantemente para publicar algo correcto según las normas actuales.

La Universidad de Deusto estableció estudios de Filología Vasca gracias a Gotzon Garate en 1976 y también la EHU UPV bajo la dirección de Koldo Mitxelena en la década de 1980. Más tarde, en 1990, la Universidad de Deusto creó el máster de traducción como postgrado y también la EHU UPV en 1991 y, en este momento, además de impartirse la Filología Vasca en varias Universidades, EHU UPV dispone de la Licenciatura de Traducción a partir del año 2000.

La Autonomía de la CAV (EAE) trajo a partir de 1979 la cooficialidad del euskara (no la oficialidad) pero la Ley 10/1982 para la Normalización del Uso del Euskara de 1982, fue recurrida por el Gobierno de España y al final, en 1986 entró en vigor, pero después de haberle cercenado los tres apartados que daban posibilidad al uso legal del euskara en solitario y por su propio pié. Por lo tanto, la Ley de Normalización del Uso del Euskara de la CAV, oficialmente al menos, es una ley que hace casi imposible el uso del euskara en solitario sin español y ha traído una cierta presencia incompleta de los dos idiomas (el euskara falta en muchos sitios) a la administración de la CAV. En Nafarroa, como siempre, con rebajas, tanto en territorialidad como en opciones de uso, publicaron su Ley Foral del Vascuence en 1986. Asimismo, en 1986 se publicó en la CAV el Decreto 250/1986, para el Uso y Normalización del Euskara en la Administración, es decir, el que reglamentó los Perfiles Lingüísticos (PL)[18] y el que aun hoy día está en vigor. En los próximos años, después de que cada administración hiciera sus planes, aprobaciones y solicitudes, a partir de 1989, comenzó a generalizarse la aplicación de los Perfiles Lingüísticos en la administración de la CAV, pero todavía no ha llegado a todos los apartados de la administración. Algunas instituciones[19] se han incluído muy tarde en esa línea de actuación y hay algunos que todavía no se han incluído (por ejemplo algunos estamentos parapúblicos de gestión creados por el Gobierno Vasco, diputaciones forales y algunos ayuntamientos. Nafarroa ha copiado vías parecidas en esas cuestiones (EGA, PLs,...) pero con exigencias mucho más bajas y con poquísimas preceptividades. De todas formas, los Perfiles Lingüísticos son una buena herramienta para exigir el conocimiento lingüístico si se aplican adecuadamente con universalidad y sin excepciones, pero no tanto para lograr el uso del euskara tal y como reza el Decreto. El conocimiento es imprescindible para el uso, pero solamente el conocimiento no es suficiente para el uso. Además del conocimiento individual del euskara que tenga cada uno, todos los eslabones de la cadena y todos los círculos de trabajo del entorno deben estar preparados y organizados para ello y, además, necesitan una dirección lingüística técnica para realizar un uso adecuado del euskara. Eso no fue muy viable hasta que a partir de 1995 surgieron los Planes de Uso del Euskara. Aun con esos Planes de Uso realizados ha habido y hay dificultades para lograr los objetivos, sobre todo en los casos en que no ha habido un proceder riguroso en la implantación de los mismos.

No obstante, en las promociones de personal, independientemente del Perfil Lingüístico, en muchos casos no se tiene en cuenta si el empleado es capaz de realizar su trabajo en euskara o no lo es y, en demasiados casos, sin tener el Perfil Lingüístico que precisa o sin valerse del mismo como es debido, se abre la ascensión impropia a puestos superiores a muchos técnicos. Ni que decir por supuesto que los cargos políticos no tienen Perfiles Lingüísticos y que están gobernando orgullosamente a muchos ciudadanos euskaldunes personas que no comprenden ni quieren comprender una palabra de euskara. A veces, es suficiente con intercalar algunas personas de esa tipología para paralizar totalmente cualquier Plan de Uso y evitar su cumplimiento. Por otra parte, cuando no hay Plan de Uso establecido, esas personas interrumpen automáticamente el uso del euskara. Luego, claro, los resultados son acordes a esos comportamientos y hablando del uso en la Administración de la CAV, la misma Viceconsejería de Política Lingüística ha publicado en su Berripapera[20] que el año 2007, de los textos que se utilizaron en euskara en la Administración, solamente entre un 10% y 20% fueron creados en euskara y que todos los demás fueron traducidos del español. Eso prueba lo que la Ley 10/1982 ha dado al euskara en la Administración de la CAV, de las diputaciones forales y de los ayuntamientos en general, después de haber estado en vigor durante 25 años. De ahí en adelante se puede hablar mucho sobre calidad, certidumbre, etc. La Administración del Estado incumple casi sistemáticamente sus obligaciones bilingües y las Administraciones de la Autonomía, ayuntamientos y diputaciones forales aún hoy todavía las incumplen asimismo en muchos aspectos[21].

Por otra parte, aun cuando yo no pude realizar aquellos estudios, hay que decir que vista la necesidad urgente se creó la Martuteneko Itzultzaile Eskola (Escuela de Traductores de Martutene)[22]. Como bien expone el que fue director de la misma, Xabier Mendiguren, desde 1976 a 1980, después de organizar en esos cuatro años cinco cursos de ese tipo en Euskal Herria, en octubre de 1980 se creó esa escuela bajo la tutela de Euskaltzaindia. Aquella escuela comenzó bien y dio resultados, pero antes de que llegara a dar los que debía, le crearon la competencia en nombre de las necesidades de la Administración y en 1986 el IVAP creó lo que se llamó ALAIE (Administrazio Lanerako Itzulpen Eskola o Escuela de Traductores para Trabajos de Administración) en Gasteiz y también IZO (Itzulpen Zerbitzu Ofiziala o Servicio Oficial de Traducción). Como en otras tantas ocasiones, como ha solido suceder al meter mano las Autoridades de la Autonomía, —AEK/HABE, Egunkaria/Proyecto de diario que no se realizó, etc.— tal y como hace poco ha escrito Iñaki Zabaleta[23], ahí también, tomando como escusa los temas de administración y derecho, "uno se dividió en dos", o mejor dicho el segundo lo creó el poder oficial, y más todavía, "uno se dividió en tres", puesto que en Derio Labayru organizó sus propios cursos de Traducción en 1986 en los cursos de verano, que luego, a partir de 1989 se convirtieron en permanentes. La necesidad de la Escuela de Traductores era mencionada por todo el mundo, pero en vez de crear y desarrollar una Escuela Oficial buena y permanente (que podía ser la creada por Euskaltzaindia), según tendencias, gustos, amigos, "enemigos" y otros intereses, fueron creándose diferentes Escuelas de Traductores, para al final tener que cerrarse todas, tal y como sucedió. Es cierto que las Universidades, tal y como he dicho antes, primero crearon los masters y luego la Licenciatura, pero a mi entender, la necesidad apremiante de unir fuerzas que existía por aquellos años, no permitían aquella dispersión; pero los que ostentaban el poder lo hicieron así costase lo que costase. Sobre la Escuela de Martutene, de sus virtudes y carencias así como de su prosperidad y decaimiento, se puede encontrar información extensa y detallada en los artículos publicados en 1990 por varios traductores[24].

Tomando otra vía, todavía me es memorable el curso organizado por UEU en Iruñea el verano de 1980 para Traductores. El experto Mikel Zalbide, que en aquel momento trabajaba en UZEI, nos explicó ya entonces con mucha maestría, lo que se llamó Euskararen Lexiko Sorkuntzarako Bideak (Los Recursos para la Creación de Léxico en Euskara) y que se ha utilizado posteriormente y se debiera utilizar en todas las Alfabetizaciones Técnicas y estudios lingüísticos de nivel superior. Estábamos matriculados unas 40 personas para aquellas clases pero en el aula solíamos estar más de 70, algunos sentados hasta en el suelo. ¡Terrible! Con los temas expuestos por él publicó más tarde Euskaltzaindia con su participación por medio de la comisión LEF, Hitz elkarketa/1 en 1987, Hitz-elkarketa/3 en 1991 y Hitz-elkarketa/4 (Hitz Elkartuen Osaera eta Idazkera) en 1992, la última preparada por el mismo Mikel Zalbide. Por aquellos años asimismo publicó HABE, cuatro libros importantes, los tres primeros preparados por Elhuyar: Zientzia eta Teknika en 1986, Aurrezki Kutxak eta Banka en 1987 y Udal Administrazioa en 1988. El cuarto lo publicó tras prepararlo UZEI: Osasun Zaintza en 1992. Esos cuatro libros están sin actualizar según las últimas normas actuales, pero merecería la pena actualizarlos y reeditarlos. Yo en mi entorno y sobre todo en las generaciones más jóvenes, veo que hay muchos euskaldunes cultos que precisan aprender de ellos.

Fue en la década de 1980 la época en que empezaron a tejerse los primeros Planes de Euskara en las empresas. Como ya he expuesto antes, de 1979 a 1987 trabajé en CAF a media jornada como Responsable de Euskara. Aquello fue logrado por el Comité de Empresa. Por una parte existía la Gaueskola (Escuela vespertina) y por otra la traducción y la redacción en euskara; así se dieron los primeros pasos de euskaldunización de la empresa. La dirección de la enpresa aprobó el plan y entonces comenzaron a publicarse los avisos y otros documentos también en euskara. Yo entré para organizar aquello. Por esas fechas comenzó el movimiento de euskaldunización en las empresas del Goierri. La empresa Fundiciones del Estanda de Beasain organizó asimismo algo similar en aquella época y Mª José Aranburu se dedicó a aquellas labores. En 1982 la empresa ELAY de Antzuola tomó asimismo una decisión similar y en 1987 tomó la decisión de abonar las matrículas de aprendizaje a los trabajadores.

Cambio de tecnología.

En el aspecto tecnológico los traductores andábamos al principio al mismo nivel que en mi infancia. Yo, como otros muchos, tenía la máquina de escribir de Hispano Olivetti modelo Lexicón 80 en el Ayuntamiento y las traducciones las escribía directamente a máquina, dado que no había tiempo en absoluto para escribir primero un borrador y transcribirlo luego a máquina. Tampoco contábamos con mecanógrafos para escribir nosotros primero el borrador a mano y transcribir ellos el texto curioso a máquina. Yo traducía las actas y otros textos y los errores o las correcciones instantáneas las realizaba utilizando el tipex y tapando con pintura blanca para escribir de nuevo encima. En una ocasión, aun cuando nadie me dijo nada, descubrí que los textos de las actas, punto por punto se enviaban aparte a los ciudadanos como acuerdos y aun aunque yo traducía el acta correspondiente, todas aquellas comunicaciones de los acuerdos se enviaban exclusivamente en español. Dado que no tenía ningún otro método ni recurso, primero comencé por traducir los acuerdos para enviar a los ciudadanos y a continuación fotocopiaba los acuerdos, para luego cortarlos con tijeras y componer a modo de puzzle aquellos fragmentos pegando con cello en una hoja blanca y completar el acta fotocopiando aquel montaje artesano. Aquellas actas no quedaron muy curiosas, pero a falta de otra cosa, de esa manera empezaron a recibir los ciudadanos los textos también en euskara, aun cuando para el archivo quedaba aquella fotocopia fea pero no había otra cosa y nadie me decia nada.

Hacia 1985 también en la administración comenzaron a extenderse la máquinas eléctricas. Ello en sí no acarreaba ningún avance significativo para los traductores que trabajábamos con la máquinas de escribir, pero enseguida surgieron en el mercado unas máquinas eléctricas que dejaban visualizar unos 60-80 caracteres en una pequeña ventanilla. Aquella ventanilla era insuficiente para visualizar el texto sin escribirlo en el papel, pero empecé a seguir la pista de aquella técnica. Entonces me enteré que también había máquinas eléctricas con pantalla. Eran unas pantallas verdes que perjudicaban la vista pero se podía escribir como hoy se hace en los ordenadores sin imprimir el texto en el papel y se podían realizar cambios o correciones antes de imprimir el texto. Además, los testos se podían guardar en unos disquetes especiales. Pedí una de esas máquinas exponiendo mis razones. No me quisieron comprender durante algún tiempo. Por aquellos días habían comenzado a trabajar con ordenador en la Oficina Técnica. Pero los ordenadores eran palabras mayores para un traductor. Por fin, conseguí la máquina eléctrica con pantalla verde y aun cuando casi dejé la vista allí, comencé a escribir los textos en la pantalla sin imprimir. Aquella máquina tuvo un coste tres o cuatro veces superior a cualquier ordenador corriente actual, casi casi como un ordenador de entonces. ¡Una inversión imponente para el Euskara! Por otra parte, particularmente avancé más en el aspecto tecnológico y para finales de la década de 1980 ya tenía en casa un pequeño ordenador Macintosh pagado aproximadamente el cuádruple de un ordenador actual y ¡tenía una memoria de 20 Mb! Valía para realizar traducciones corrientes de textos y también para realizar maquetaciones y ¡aquello era terrible!

Década de 1990: Comienzo con los ordenadores en el puesto de trabajo.

En la década de 1990, enseguida dieron inicio los programas y presupuestos para introducir innovaciones en las oficinas de las administraciones. En la década anterior, a partir de 1985, hubo también algunas administraciones que tomaron ese rumbo, pero generalizarse se generalizaron en la década de 1990. Poco a poco, según el poder de los funcionarios y sus jefes políticos, fueron introduciéndose los ordenadores, inicialmente los PCs y el programa Wordperfect que tenía ocultos las claves de las funciones. Entre otros, hice un cursillo en Goierriko Lanbide Eskola en 1991 y entonces me instalaron un ordenador de pantalla negra. ¡Bueno! ¡Habíamos empezado a modernizarnos! Pero como he dicho antes, prefería los programas del ordenador Macintosh que tenía en casa al Wordperfect del PC porque se podían realizar las operaciones por medio de iconos y de forma visible.

Por fin, en 1995, después de un cursillo dado por los de El Corte Inglés después de la compra, comencé a utilizar el Windows en el Ayuntamiento junto con todos los demás compañeros de trabajo y empecé a trabajar con esquemas semejantes a los actuales. El Windows trajo el modo de trabajar de una forma parecida al Macintosh de antes pero con mucha más capacidad y eso fue de mi gusto. Al menos llegué a valerme o los traductores llegamos a valernos de la tecnología de una forma adecuada en esa época. De ahí en adelante comenzaron los trabajos de guardar y apilar. Además de guardar bien lo realizado en disquetes y más tarde en CDs, fueron surgiendo más recursos, entre ellos el corrector Xuxen, Diccionarios, Atzekoz aurrera, etc.

En 1995, EHU/UPV junto con la VPL/HPS[25] del Gobierno Vasco estableció la Diplomatura para la Planificación del Euskara, después de haberlo solicitado un grupo amplio de personas (UETS)[26] que estábamos trabajando en los Ayuntamientos en el campo del Euskara. Fueron 200 horas de un postgrado en Leioa y una tesina final. De ahí surgieron los Planes de Uso del Euskara de los Ayuntamientos. Ese postgrado tuvo continuidad los póximos años, pero no se cómo sigue en la actualidad.

Asimismo, en la década de 1990, por impulso de los trabajadores de las empresas por una parte y por la acción de las ayudas económicas ofrecidas por la VPL/HPS por otra, comenzaron a hacerse planes para introducir el uso del euskara en las empresas. Entre ellas la pionera, junto con otras empresas (algunas cooperativas entre ellas) fue, la empresa ELAY de Antzuola (luego ELAY BALZERS). En 1991, al comenzar a hacer el plan, tenía 149 trabajadores, y de ellos alrededor del 70% sabía euskara, pero las reuniones se realizaban al 100% en español. Después de realizar el plan de Euskaldunización, desarrollarlo, percibir las ayudas establecidas, etc., a los 10 años, el año 2001, la empresa tenía 282 trabajadores de los cuales más del 90% conocían el euskara y el 77% de las reuniones las realizaban en euskara. El plan ha continuado su camino y en este momento posiblemente será muy difícil que en esa empresa se pueda entrar a trabajar sin conocer el euskara al nivel que exija cada puesto de trabajo. Asimismo, en muchas cooperativas de Deba Goiena y Goierri, existen muchos planes semejantes. Por otra parte, tres son las empresas que han destacado, entre otras, en la dirección de esos planes: Elhuyar, Emun y Artez. Hay también otras entidades que tienen sus propios planes de euskaldunización: algunas universidades y entidades de otra índole. No obstante, hay demasidas empresas y entidades privadas que no tienen planes de euskara.

En el Goierri, en la década de 1990 y al inicio de la de 2000, hay bastantes empresas (las mayores) que han realizado y desarrollado sus planes de euskara: CAF de Beasain, IRIZAR de Ormaiztegi, INDAR de Beasain, ORKLI de Ordizia, AMPO de Idiazabal y también otras empresas más pequeñas de Beasain y Ordizia. Los esfuerzos y los resultados no han sido los mismos en todas y esos planes tienen sus luces y sombras, pero siguen actuando. Luego tendrán que medir los resultados uno por uno y como en economía tendrán que sacar sus conclusiones para las actuaciones del futuro.

Uno de las mayores carencias que se siente en ese aspecto es el que la VPL/HPS del Gobierno Vasco y la Consejería de Trabajo, en conjunto, no hayan establecido ni impulsado ningún marco estratégico con plan lingüístico para las empresas de nueva creación, es decir, el no haber creado vías de promoción especial para las empresas nuevas a crear con técnicos y trabajadores euskaldunes y que desde su inicio funcionen en euskara. Al parecer eso no es estratégico. No hace falta decir que las empresas que tienen los mencionados planes, más o menos, están realizando trabajos de traducción, redacción, terminología y similares y visto desde todos los puntos de vista, están llevando a cabo una acción imprescindible y estratégica para euskaldunizar Euskal Herria.

Década del 2000: Internet y memorias de traducción.

La década del 2000 ha traído el internet a la Administración. Aun cuando ya había empezado a introducirse en algunas empresas anteriormente, fue al final de la década anterior e inicio de la presente cuando se ha generalizado el internet en la administración. Eso ha traído un avance enorme, entre otros las consultas de todo tipo por medio del correo electrónico y el internet (páginas web). Trabajos realizados y guardados por éste y por aquél se han ido poniendo en la red. La asociación EIZIE (Asociación de Traductores, Intérpretes y Correctores Vascos) misma ha puesto en la red el banco de traducciones ITZUL, UZEI el de terminología EUSKALTERM, las asociaciones ELHUYAR y ADOREZ sus diccionarios, el diccionario de Ciencia y Técnica, los Diccionarios de sinónimos, etc.; asimismo ahí están las Enciclopedias, los trabajos de lexicales de EHU/UPV, la base de datos Inguma y otras de UEU, Hiztegi Batua (Diccionario unificado) de Euskaltzaindia así como las Normas, muchos recursos lingüísticos del Gobierno Vasco, Wilkipedia en euskara, etc., para citar solamente algunos de los recursos más corrientes. Es un avance enorme para cubrir las necesidades de consulta disponer en la barra de internet de diferentes diccionarios, diccionario unificado, enciclopedias, etc., tal y como podemos diponer hoy día. Es también enorme el poder entrar en diferentes páginas web. Esos han sido pasos de gigante para poder consultar los interesantes bancos de datos por medio de la red. Se puede decir lo mismo sobre las consultas de diccionarios de otros idiomas. También para el envío y recepción de documentos de un lado para otro casi instantáneamente.

Por otra parte, con los ordenadores de los últimos años y los programas especiales que se han creado, se han podido compilar memorias de traducción. A mí en concreto, después de seleccionar y meter los documentos en 2004, me tocó el año 2005 comenzar a probar la herramienta. Partiendo de una masa textual bilingüe de un millón de caracteres, en la medida que se va elevando esa masa textual acumulada, ofrece posibiladades enormes de uso. Al comenzar a traducir cualquier texto, funciona por párrafos y si con anterioridad se halla introducido ya en la memoria un texto similar al texto a traducir, aparece inmediatamente y si existen traducciones similares realizadas más de una vez, aparecen todos los diferentes párrafos que tengan alguna relación con el que se ha de traducir. El programa marca un porcentaje de equivalencia entre el texto a traducir y los dierentes textos existentes (si es totalmente equivalente el 100% y un color concreto, verde, si tiene una similitud del 70%, la cifra y otro color, naranja por ejemplo, etc.) Eso acarrea un avance enorme en el trabajo en cualquier campo, pero sobre todo en la administración, porque los textos se vuelven a repetir muchas veces con mucha frecuencia en un intervalo concreto de tiempo. Es un avance enorme para realizar traducciones, pero a mi, por desgracia, ese sistema me ha pillado demasiado tarde en la administración y solamente me he podido valer del mismo durante unos tres años antes de jubilarme del trabajo.

De los Planes de Uso del Euskara, tal y como he mencionado antes, decir que los que se iniciaron hacia 1995 han ido tomando cuerpo y fuerza en las administraciones y en las empresas y han continuado con su extensión, sobre todo a partir de que en 1998 se creara la asociación Euskararen Gizarte Eragileen Kontseilua[27] y se crearan durante los años próximos BAI EUSKARARI AKORDIOA (ACUERDO SI AL EUSKARA) y BAI EUSKARARI ZIURTAGIRIA (CERTIFICADO SI AL EUSKARA). Los acuerdos suscitaron los Planes de las instituciones y las empresas y el certificado trajo consigo la evolución de los planes. Lo que se inició en las instituciones públicas y entidades privadas fue extendiéndose y sigue extendiéndose a toda Euskal Herria.

Pero, también en este caso, la VPL/HPS de EAE/CAV obró con el principio antes mencionado de "uno se divide en dos" y el año 2003, con muchísima urgencia, creo paralelamente EBPN[28] para desarrollar las recomendaciones que el Consejo Asesor del Euskara del Gobierno Vasco de la EAE/CAV creado anteriormente sugería para las administraciones de EAE/CAV. Otra interrupción en el trabajo común y discusiones inútiles entre los representantes políticos en las instituciones, sobre todo en los ayuntamientos. Por otra parte, al efecto de denunciar las infracciones de uso del euskara o ensalzar los usos y recoger y cuantificar la información, Kontseilua creó la entidad BEHATOKIA y durante muchos años ha levantado acta de las infracciones de uso del euskara de las instituciones públicas y privadas de toda Euskal Herria realizando sendos informes anuales al respecto. Esos informes han sido presentados en foros internacionales de los organismos competentes. Pero siguiendo el principio antes mencionado de "uno se divide en dos", una vez más, la VPL/HPS de la EAE/CAV creó ELEBIDE para recoger y gestionar las infracciones lingüísticas de las administraciones de la EAE/CAV. Además de realizar la notificación, no se si tiene capacidad para resolver la infracciones lingüísticas de su propia casa. Eso mismo se ha repetido con BAI EUSKARARI ZIURTAGIRIA de Kontseilua y el certificado BIKAIN de VPL/HPS y ahora, según parece, para conceder las subvenciones parece que solamente quieren dar fe a la certificación BIKAIN. Según parece, algunos no tienen más objetivos que copiar las iniciativas sociales de otros y aplicarlas en su territorio parcial y limitado con poder oficial tratando de hacer desaparecer las de los creadores.

En todo caso y en cuanto a los planes se refiere, se opte por una fórmula u otra, los medios puestos para lograr los objetivos y la rigurosidad en evaluarlos expresan lo que se ha realizado o lo que se ha dejado de realizar. Hay que decir que todavía hay ayuntamientos en la EAE/CAV sin plan EBPN/PGPUE pues esos planes, siempre, como el Decreto de los Perfiles Lingüísticos[29], han sido aprobados o no según la voluntad de cada ayuntamiento o administración correspondiente y nunca de obligado cumplimiento dentro del territorio para todos los estamentos. Al desarrollar el EBPN/PGPUE se ha solido conceder bastante dinero, sobre todo para actividades de innovación y eso ha fomentado durante algún tiempo nuevos proyectos, pero se han incluído asimismo muchas cosas de relleno para percibir las ayudas, aun cuando no fueran muy eficaces para la promoción del uso del euskara. Entre otras cosas hay que señalar que EBPN/PGPUE no ha logrado fijar plantillas suficientes y necesarias de profesionales, firmes, fuertes, fijas y permanentes necesarias que no existían anteriormente y que han sido formadas por trabajadores temporales, subcontrataciones, personal de euskaltegis municipales y semejantes, que tan pronto pueden instaurarse como hacer desaparecer, si se dejan de percibir subvenciones o cambian los deseos políticos. Sin fijar equipos de profesionales competentes es difícil obtener logros importantes y continuados. Por lo tanto, aun cuando hay tareas enormes a realizar, pongo en duda su continuidad en muchos lugares y sobre todos su calado y, desgraciadamente, la vida y el desarrollo de muchos de esos servicios de euskara estarán una vez más en manos de los políticos de turno. Otro defecto fundamental de los planes es que no tienen plazo de cumplimiento, que no tienen fecha final. Especialmente en la Administración no existe una sola fecha para lograr un objetivo concreto y, más aún, los cambios de autoridad pueden poner los logros anteriores en vías de desaparición en cuanto el uso del euskara. ¡En la sociedad no hay otro campo que suceda eso!

Con las cosas así, desgraciadamente tendrán larga vida los traductores de la Administración al objeto de garantizar esa presencia de segundo orden del euskara, pues los trabajadores de la administración, incluso con sus perfiles lingüísticos y planes de uso, continuarán realizando su trabajo de creación fundamentalmente en español en demasiados lugares porque los políticos no quieren crear cadenas de trabajo y circuitos euskaldunes, dado que de crearlos, ellos mismos en muchas ocasiones resultarían atrapados por el funcionamiento del sistema en euskara.

Para terminar, decir que en cuanto al idioma se refiere, desde 1968 hasta hoy nos ha tocado tener que andar alfabetizándonos contínuamente a los de nuestra generación, porque siempre han surgido o creado nuevas facetas y normas o se ha optado o dado preferencia a tendencias nuevas o principios diferentes de las anteriores. En el aspecto técnico o de recursos nos ha ocurrido algo similar y hemos tenido que trasladarnos desde las máquinas de escribir de la escuela de 1950 (que continuaban trabajando en la década de 1980) hasta los ordenadores y las memorias de traducción de hoy día siguiendo los cambios técnicos permanentemente. Aun cuando no siempre dominando bien los recursos, los traductores hemos llegado a utilizarlos. De ahora en adelante veo a la técnica de la traducción cada vez más ligada a una mayor automatización y la utilización del léxico y las normas recogidas, aprobadas y acordadas está convirtiéndose de uso casi instantáneo. Pronto, quizás vayan también por esa vía los trabajos de intérprete y tanto en la traducción escrita como en la oral, la vía automática se ha iniciado ya y la tenemos a la puerta. Eso acercará mucho en el camino hacia el resultado final, pero a mi entender, más o menos siempre será necesaria la participación de alguna mente preparada para realizar la selección correcta entre las posibles soluciones y creo que será imposible lograr resultados automáticos perfectamente correctos.

Que tengáis buena suerte todos los que trabajáis en la traducción y en el desarrollo del euskara con todos esos recursos actuales y que la tengan igualmente los que nos sigan en el futuro ¡con esos recursos y otros muchos más que vendrán en el futuro!


Notas

1. Ver por ejemplo los del Goierri, en el libro escrito por mí: Alfabetatzearen hastapenak Goierrin. Aurresaioak eta 1967tik 1975erakoak, Goierriko Euskal Eskola Kultur Elkartea, año 2000, páginas 15-18.

2. Ibidem, páginas: 21-23. y 110.

3. Ibidem, páginas 24-28.

4. OARGUI: Organización Atlética Recreativa Guipuzcoana. En Gipuzkoa se formaron en muchos pueblos esas asociaciones y junto con otros como HERRI GAZTEDI que eran de ámbito rural, fueron los que más apostaron por el euskara. En el Goierrin hubo asociaciones de OARGUI en Lazkao, Beasain, Ataun (todavía continúa con ese nombre), Legorreta, etc.

5. 5El libro mencionado Alfabetatzearen hastapenak Goierrin. Aurresaioak eta 1967tik 1975erakoak, Goierriko Euskal Eskola Kultur Elkartea, año 2000, pág. 23.

6. El libro mencionado Alfabetatzearen hastapenak Goierrin. Aurresaioak eta 1967tik 1975erakoak, páginas 24-33.

7. La publicación que tengo yo es del año 1949 y dice lo siguiente: Garikoiz´tar Laguntzaiĺeak, "Martha-baita" Ascain (France, B.-P.). Hasta la década de 1960 aquel misal se vendió casi clandestinamente en el convento de los padres benedictinos de Lazkao y mi difunta madre lo compró allí. En las librerías del Goierri no estaba en venta.

8. En la década de 1960 nos enteramos en casa, como noticia peculiar, que en un caserío del barrio tenían el libro titulado Testamentu zarreco eta berrico condaira de Frantzisko Ignazio Lardizabal de Zaldibia y que debía tener cien años o más... y el señor del caserío acerca de él solía decir «lehengo garaietan ere gauza harrigarriak gertatzen zirela» (antaño también sucedían cosas increíbles). En nuestra casa teníamos en euskara Loinazko San Martinen bederatziurrena (La novena de San Martin de Loinaz) publicada en 1897 por el pueblo de Beasain en el 4º centenario de su muerte.

9. Esos cursos se impartieron durante dos cursos en español en aquella época y luego no tuvieron continuidad. 22 años más tarde, el año 2001, se ha instaurado en Goierriko Lanbide Eskola la Ingeniería Técnica bajo la tutela de Mondragon Unibertsitatea, pero esta vez en euskara, tal y como requiere ya esta década.

10. La Escuela Profesional del Goierri de entonces (hoy Goierriko Lanbide Eskola) creo que fue la primera Escuela Profesional que estableció aquella especie de modelo A en Formación Profesional.

11. EAE = Euskal Autonomia Erkidegoa / Comunidad Autónoma del País Vasco (CAPV). Comunidad Autónoma de España que incluye a Araba, Bizkaia y Gipuzkoa. Ese nombre en euskara es el nombre aprobado por Euskaltzaindia para esa autonomía. Dando cuenta de sucesos lingüísticos de la época escribí un artículo en la revista Senez, nº 4, el año 1985: Administrazioa eta euskara: itzultzaileak eta arduradunak. Ver las menciones sobre el tema en el apartado 4 (pág. 4).

12. Ibidem. El artículo de Senez mencionado. En el mismo expuse bastante extensamente la situación de los traductores.

13. Ibidem.

14. Yo diría que el euskara en la administración y en la vida oficial tiene el espacio que le han "dejado" los políticos no-vascoparlantes, no el "diseñado y realizado" por vascoparlantes alfabetizados funcionales y es consecuencia de ello el que siempre y en todo lugar el euskara, como máximo, sea cooficial, que siempre aparezca al lado del español, que el documento inicial se haga en español y luego se traduzca al euskara, que la mayoría de las Administraciones Públicas (mayoritariamente los Departamentos del Gobierno Vasco), todavía hagan el trabajo de creación fundamentalmente en español, el que en pueblos pequeños euskaldunes los técnicos redacten los documentos tranquilamente en español y luego alguien los traduzca al euskara, o que los realizados en euskara inicialmente sean muchas veces de una calidad bastante mala, etc., etc.

15. En el diccionario Administrazioa, zirkulazioa. Hiztegia que se publicó en 1983, en el diccionario Teknologia mekanikoa. Hiztegia. I eta II publicado en 1985 y en la preparación de los modelos de impreso que se incluyeron en el diccionario Zuzenbide Hiztegian I. publicado el mismo año.

16. EHU = Euskal Herriko Unibertsitatea / Universidad del País Vasco (UPV), tiene ese nombre aun cuando sólo lo es de la CAV.

17. HAEE = Herri Arduralaritzaren Euskal Erakundea. Nombre puesto en ese euskara raro que he mencionado al inicio de la autonomía de la CAV. El nombre original le pusieron en español, como es costumbre el la administración, y es el siguiente: Insitituto Vasco de Administración Pública (IVAP).

18. PL = Perfiles Lingüísticos. Niveles de conocimiento de euskara establecidos para los puestos de trabajo de la administración de la CAV. Los hay de cuatro niveles: PL1, PL2, PL3 y PL4.

19. Osakidetza y Ertzaintza por ejemplo.

20. Berripapera, mayo de 2007, nº 180.

21. No hay mas que ver los informes anuales de Behatokia y de Elebide y esos casos no son excepcionales, sino habituales.

22. Xabier Mendiguren, Itzultzaile Eskola, Senez, 1; 1984.

23. Iñaki Zabaleta Urkiola, «Bat bitan beti», Jakin, noviembre-diciembre de 2008, pág. 75.

24. Revista Senez, nº 8. Trabajos redactados por Xabier Mendiguren, Joseba Urzelai y Lurdes Auzmendi y Josu Zabaleta entre otros.

25. VPL = Viceconsejería de Política Lingüística /Hizkuntza Politikarako Sailoretza (Consejería de Cultura / Kultura Saila).

26. UETS = Udaletako Euskara Teknikarien Sarea (Red de Técnicos de Euskara de los Ayuntamientos) nombre que se dio al grupo. Aun cuando no fue ninguna institución ni asociación organizada, durante unos quince años nos reunimos muchos técnicos de euskara de los cuatro territorios de Euskal Herria Sur con cierta frecuencia y desarrollamos e intercambiamos muchos proyectos comunes. Luego, la diferente constitución de los técnicos en Nafarroa, el que algunos al hacer la Diplomatura pensaran que las cuestiones estaban ya resueltas, las reuniones en la mesas de trabajo creadas por la Diputación Foral de Gipuzkoa, etc., acarrearon la desaparición de UETS pero entre los técnicos no ha quedado nada que cubra el extenso espacio que cubría UETS. Diez años más tarde, los técnicos se reunen solamente cuando son llamados por las instituciones superiores y, aún hoy día, creo que siguen en esa línea. Las instituciones han logrado la desaparición de una entidad creada naturalmente por los profesionales del euskara y el que se reunan cuando les interesa a ellos y solamente con los de las áreas que a ellos les interesean.

27. Euskararen Gizarte Eragileen Kontseilua (Consejo de los Agentes Sociales del Euskara) fue creado en su momento por muchos agentes sociales del euskara y en este momento 45 asociaciones forman parte del mismo.

28. EBPN = Euskara Biziberritzeko Plan Nagusia / Plan General de Promoción del Uso del Euskara.

29. Conozco todavía en el mismo Goierri un pueblo muy euskaldun que tiene todavía sin fijar bien los Perfiles Lingüísticos y estoy seguro de que todavía hay algunos más por ahí.