Ironías del señor Berlusconi
El canciller alemán Gerhard Schroeder ha exigido al primer ministro italiano Silvio Berlusconi que presente disculpas públicas sobre su comentario en el que comparó a un parlamentario alemán con un guardia nazi.
Con el aplauso del Parlamento alemán en Berlín, Schroeder declaró que esperaba del señor Berlusconi «una excusa formal y plena por tan inaceptable comparación». «El comentario, la comparación, es un error tanto en su forma como en su contenido, y resulta totalmente inaceptable», declaró el canciller alemán.
El líder italiano armó un buen escándalo en el Parlamento Europeo al sugerir que Martin Schulz, un parlamentario europeo socialista alemán que había criticado anteriormente a Berlusconi, encajaría perfectamente en el papel de guardia nazi de un campo de concentración, en un film que se rueda en Italia.
El incidente ha provocado un extraordinario estrépito diplomático entre dos de los principales miembros de la Unión europea. El presidente del Parlamento Europeo, Pat Cox se ha apresurado a decir que mediará ante el presidente italiano, para tratar de poner fin al conflicto. Cox mantuvo contactos con los líderes de los grupos parlamentarios para buscar una disculpa formal por parte de Berlusconi.
A pesar de ello, el líder italiano ha rehusado retractarse de su comentario, y lo ha descrito como un chiste irónico que los traductores no han sabido transmitir. Berlusconi acusó a la izquierda italiana de intentar boicotear deliberadamente su comparecencia ante el Parlamento Europeo, aunque no aclaró en qué consistía tal boicot.